Emprendedor vs Empresario

Muchas personas confunden los términos emprendedor y empresario y hasta entienden que son sinónimos pero, no es así. Conocer la diferencia entre estos conceptos puede redundar en el éxito del desarrollo de un buen emprendimiento a empresa exitosa.

Para entender ambos conceptos es necesario recurrir sus definiciones según provistas por la Real Academia Española.  La palabra emprender es la acción de comenzar y desarrollar un proyecto, una obra o un negocio. Sin embargo, la palabra empresario significa “titular propietario o directivo de una industria, negocio o empresa”.  La palabra clave en esta definición es empresa, la cual se define como “unidad de organización dedicada a actividades industriales, mercantiles o de prestación de servicios con fines lucrativos”. Al definir empresa como organización, se crea la necesidad de definir la palabra. La RAE definió organización como “asociación de personas regulada por un conjunto de normas en función de determinados fines”. Por otro lado, Robbins & Coulter definieron organización como el “conjunto de personas constituido en forma deliberada para cumplir un propósito especifico”.

El emprendedor comienza un negocio al identificar una brecha en el mercado del producto o servicio que intenta desarrollar, procurando satisfacer una necesidad que otras empresas en el mercado no están satisfaciendo. A medida que el emprendedor cumple con su cometido, el mercado demandará el producto o servicio que desarrolla. Mientras el emprendimiento tenga éxito, más personas estarán demandando el producto o servicio. En ese momento, el emprendedor se encontrará en una encrucijada; aumenta su producción para satisfacer la demanda o se mantiene a la misma capacidad rechazando atender a su nueva clientela.

Usualmente el emprendedor recurre a atender su nueva demanda requiriendo emplear nuevos recursos y convertir su emprendimiento en una empresa organizada. A ese momento, el emprendedor intentará manejar su negocio a un nivel empresarial sin contar con el conocimiento técnico de la administración. El problema entonces consiste en que el emprendedor no tiene el conocimiento de cómo llevar su negocio a convertirse en una empresa u organización. El emprendedor de un principio no estableció las normas necesarias, la estructura requerida para instituir una empresa. Para transformar su negocio de un emprendimiento a una empresa, el emprendedor necesitará aprender los conceptos básicos de la administración.

La administración consiste en cuatro funciones básicas. Estas son: planificar, organizar, dirigir y controlar. El conceto de planificar incluye entre otros factores el proceso de definir la visión, misión, objetivos y planes que los miembros de la empresa necesitarán ejecutar para cumplir el propósito por el cual se creó la empresa. La función de organizar consiste en crear la estructura operacional y procesal necesaria para cumplir con el propósito de la empresa. La próxima función es la de liderar la organización. Pocos emprendedores tienen suficiente conocimiento de lo que toma liderar la organización en la dirección correcta. La última función es la de controlar. En ella se establecen los reportes para medir el nivel de éxito en el cumplimiento de los objetivos y metas al planificar.

Un emprendedor debe ejecutar desde el principio la actividad de preparar su emprendimiento a convertirlo en una empresa y simplificar el proceso de transformación de negocio a empresa.  El emprendedor debe reconocer la necesidad de capacitarse en las áreas básicas de empresarismo, de la administración de negocios. Para ello, debe adjudicar tiempo en su horario semanal y dedicarlo a su capacitación empresarial.  Así poder responder responsablemente al crecimiento de su empresa beneficiando al mercado de su producto o servicio con las características intrínsecas que le hacen el negocio con una oferta única.

Por: José M. Cueto-Rivera
Presidente, Training & Coaching First
josemcueto@gmail.com